18 de mayo de 2009

Copyfighter

Cory Doctorow en Rolling Stone Argentina:
(...) muchos músicos están despertando. Quizá no les guste lo que está pasando con Internet, porque durante toda su carrera les llenaron la cabeza diciéndoles "no te dejes copiar". Pero de ahí a ir en contra de sus propios fanáticos... En Estados Unidos, miles de personas fueron enjuiciadas, pero esas ganancias no fueron para los creadores. El artista promedio quiere ser recordado como el tipo con el que sus fans perdieron la virginidad, no como el tipo con el que sus fans perdieron el disco rígido. Es terrible que cada vez que pienses en, por ejemplo, Tom Waits, digas: "Por culpa de ese tarado perdí mi tesis de diez años que estaba en el mismo rígido que su álbum".

¿No se supone que estas organizaciones velan por los artistas?
Hay un sucio secreto en la industria discográfica: en Estados Unidos, el 97 por ciento de los artistas cobra apenas 600 dólares al año con este modelo. Es decir, con la excepción de un puñado de artistas, nadie en la industria musical hace suficiente dinero, sólo los ejecutivos. Siempre ha sido así. De la gran mayoría de personas que quieren hacer arte, sólo una ínfima porción logra hacer dinero con el arte. Y esto es culpa de la explotación de algunos intermediarios, pero también, y sobre todo, porque la economía en el arte es irracional. Cuando un zapatero se da cuenta de que el costo de reparar zapatos es más alto que las ganancias, busca otro trabajo; el artista insiste.